Os recuerdo que el mayor llevaba dos años queriéndose cambiar de instituto, porque no estaba bien en el anterior, y por fin empezó primero de Bachillerato en un centro nuevo. No le ha costado nada hacer amigos, porque ya tenía conocidos allí, y se ha adaptado estupendamente a la vida del centro.
No sé si os lo conté, pero el instituto anterior, a pesar de ser público, era gobernado desde hacía mil años por el mismo director, que hacía y deshacía a su antojo. Mi hijo en el último año se convirtió en un objetivo a batir. Tuvo un parte de amonestación por mal comportamiento porque se enfrentó a una profesora (sí, como lo oís, yo también aluciné cuando me lo dijeron). Según él le sacó a la pizarra para ridiculizarle y meterse con él. Y contestó mal y salió de clase indignado. Esto último es lo que cuenta la profesora, lo anterior no. Pues bien, desde ese momento, campaña de acoso y derribo contra él, empezó a faltar a clase, a no querer ir. Ya la adolescencia le tenía desmotivado pero esto terminó de rematarle. Y el director llegó a decirle que no querían alumnos como él en el centro.
Al llegar al instituto nuevo, con él llegó un profesor del centro anterior, que no le había dado clase ni nada, pero advirtió a sus compañeros de que iba a dar problemas. ¿Problemas? Un problema, una vez, en cuatro años. Parece que no supieran lo que son problemas. Les dejaba yo un rato con mis alumnos.
En fin. Esto último me lo contaron sus profesores, que estaban alucinados de que alguien les hubiera puesto en contra del chico, porque al ir conociéndole se había convertido en el mejor alumno de la clase; me dijeron que era un alumno brillante, de los que ya no quedan, con curiosidad e interés y muchas ganas de sacar buenos resultados.
Y os lo cuento no porque sea mi hijo, sino para que veáis el daño que hacen los prejuicios sin conocer, y cómo las etiquetas, de las que tanto hablamos, nos convierten a veces en lo que no somos.
Ha estado muy centrado todo el año, apenas ha salido por estudiar, y el resultado ha sido una media espectacular y un niño centrado en lo que quiere estudiar en su futuro y trabajando para hacerlo posible. Estamos muy contentos con el cambio.
El pequeño también ha ido muy bien. Desde el principio se ha adaptado bien al centro. Yo le insistía en que el instituto iba a ser para él mejor que el colegio y lo ha sido. No se acaban todos los problemas que tiene para relacionarse de un plumazo, pero ha mejorado mucho. Tiene un grupito de amigos en el centro, y no está solo. Ha salido tres o cuatro veces a lo largo del curso al cine con amigos y un par de veces más a los congresos de manga con algunos otros. Se le ve contento, aunque sigue sin gustarle ni estudiar ni todo lo relacionado con lo académico.
Ha ido bastane bien. Suspendió Educación Física una evaluación, pero me extraña poco porque es bastante patoso. Y al final el profesor le hizo prometer que nadaría a diario todo el verano.
El último trimestre se le hizo muy cuesta arriba, pero es que todo no se puede, y a mediados de junio tenía la prueba del conservatorio, y antes de eso los exámenes. Todo junto hizo que bajara las notas, que no son muy altas pero no están mal.
Este año descubrió que le apasiona la Biología, en la que no baja del sobresaliente, pero aborrece los idiomas (al contrario de su madre y su hermano, y quizá por los profes que ha tenido). Lo ha pasado bien, se ha hecho más independiente, ha ido de excursión sin preocuparse si iba a estar solo... han sido muchas cosas. Y también por todo eso estamos felices.
Y más o menos ese es el resumen de un curso que ha dado para mucho.
No sabes como te entiendo respecto a lo del cambio de colegio, lo que me parece de muy mal profesional es el comportamiento del profesor. Me alegro mucho que tu hijo haya podido demostrar lo que vale, dejando en evidencia al "bocazas".
ResponderEliminar¡Ahora a disfrutar del verano!
Lo del profesor es horrible, pero afortunadamente no sirvió de nada. Mi hijo ha tenido muy buenos profesores este curso (no por el cambio de centro, los hay buenos y malos en todas partes) y han sabido sacar mucho de él.
EliminarBesos.
Fantástico que hayan tenido un curso estupendo y hayan madurado tanto; también una bofetada sin manos para todos los bocazas e ineptos que tuvieron que soportar en los otros centros. Ahora toca disfrutar del verano :-)
ResponderEliminarNos movemos mucho a base de prejuicios.
EliminarBesos.
Pues no ha ido nada mal ¿no?. Me alegra mucho.
ResponderEliminarEntiendo a tu hijo en lo de los idiomas, porque a mi hija este año le ha pasado lo mismo. El próximo curso no quiere escoger francés otra vez porque ha empezado a odiar la asignatura "gracias" a la nueva profesora. Y a mí me da muchísima rabia. Y odio culpar a profesores, pero en este caso es justificado, porque a esta profesora incluso han tenido que llamarle la atención sus propios compañeros, el tutor y el jefe de estudios. Es una pena que, a veces, una mala experiencia con un profesor haga cambiar los pasos de un alumno y deje cosas interesantes para no volver a toparse con el profe en cuestión.
Ahora toca disfrutar del veranito, que todos se lo han ganado.
Un beso
Ha ido muy bien.
EliminarMi hijo no quiere el francés (y tiene que seguir con ello) y dice que cuándo puede dejar el inglés. Y han sido sus profes de este curso. Pero espero que remontemos.
Besos.
Desde luego no te puedes quejar de año. El peque también habrá que tener en cuenta que ha cambiado mucho al pasar al instituto; el mío ha sido este año (en 3º, y si, para matarlo), cuando dice que ha empezado a estudiar. En ese aspecto le veo algo mejor, pero todavía le falta adaptarse al trabajo diario, que no será porque no tiene capacidad. Y éste es el último año de "broma", que luego empieza el bachillerato y ya si que se ponen las cosas serias.
ResponderEliminarMe alegro mucho también por el mayor. Vaya profesor simpático el que le acompañó. Y lo que cuentas del parte, pues a una amiga de mi hija, otro profesor la ha amenazado con lo mismo sin razón, por la niña exponer sus motivos. La madre ha pedido tutoría urgente a estas alturas, para ver si el año que viene se pueden arreglar las cosas, porque es un caso bastante injusto.
No me enrollo más que es un tema muy largo :)
No me quejo nada en absoluto. Mi mayor ha tenido un par de años de adolescencia rebelde, pero en el instituto se tradujo en bajada de notas y faltar a alguna clase. Nunca se quejaron del comportamiento. Y una cosa puntual (por la que le reñimos, por supuesto) no puede suponer que se haga la vida imposible a alguien para que se vaya. All menos yo no lo entiendo así.
EliminarBesos.
Felicítalos son unos campeones y tú una profe y madre estupenda. Eres mi inspiración
ResponderEliminarMuchas gracias. No sé qué hacer con tus palabras... gracias.
EliminarMi enhorabuena a los dos Ro, os habéis ganado todos (sí sí, tú también que se de buena tinta que estás más que involucrada en todo, jajajaja) unas estupendas vacaciones.
ResponderEliminarMenudo cambio a mejor en el nuevo instituto tu mayor (ya sabes que soy fan ;-). De verdad que lo que cuentas es tremendo. Querer poner en contra de un alumno nuevo a los profesores. Parecen cosas más bien de patio de recreo de colegio. Ay...
Y tu peque, pues estará eufórico. Con su música feliz, y con todo aprobado. A nadar sin parar todos los días, jejeje...
Ay, que tiempos aquellos de ir a recoger las notas. Qué lejanos me parecen.
Un besín
Este verano toca nadar y nadar... si nos dejan las tormentas...
EliminarBesos.
Enhorabuena a tus chicos!!
ResponderEliminarMuchísimas gracias.
EliminarBesos.
Vuelvo a tu blog después de un tiempo y me encuentro con esta alegría. Muy contenta de que el cambio haya sido positivo. De corazón.
ResponderEliminarHa sido un cambio muy bueno para los dos. Tocaba año de cambios y lo hemos superado con nota.
EliminarBesos.
Qué bien, me alegro mucho de tan buenas noticias.
ResponderEliminarUn beso
Estamos muy contentos.
EliminarBesos.
Cómo me alegran los éxitos de tus chicos. Felicidades a los cuatro por los esfuerzos.
ResponderEliminarMe alegro mucho de que todo haya ido bien.
ResponderEliminarAhora a disfrutar del verano
Besos
Me alegra mucho que a los dos les haya ido tan bien!
ResponderEliminarUn beso, guapa :)
Alucino con lo de tu hijo mayor y el profesor que venía de su antiguo instituto.
ResponderEliminarCambios para bien! Enhorabuena a toda la familia por esta merecida tranquilidad ^^
ResponderEliminarMe encanta leer tantas cosas positivas :D Os lo merecéis.
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