Sabéis que me gusta contar las cosas como son.
Adoro a mis hijos y no los cambiaría por nada del mundo, porque elegí tenerlos y son mi principal razón para vivir.
Pero hay días en que una quisiera ser soltera, no haber conocido al padre de las criaturas o al menos que no se te hubiera ocurrido nunca ponerte a procrear.
Los dos últimos días han sido de esos.
El mayor:
Habíamos preparado una exposición oral para Biología. El tema tenía que ser una enfermedad. Mi hijo, que esta en esa etapa, escogió la esquizofrenia. Su madre y él días y días buscando información, preparando un Power Point, preparando lo que va a decir, buscando las pronunciaciones de gran parte de lo que tenía que decir en inglés (tiene la biología en inglés)... y el miércoles a las mil estudiando por la noche, cronometrando el tiempo, y luego levantándonos pronto por la mañana...
Y cuando vuelve a casa, se había equivocado de día, y no era el jueves.
El pequeño:
Exámenes por doquier, ensayos de instrumento, ensayos con pianista, un concierto para el viernes, un examen para el viernes... A las diez de la noche se acuerda de que no ha hecho los deberes de lengua. A las once de que, además, cree que tiene examen de flauta. Y no le he visto tocar la flauta nunca.
- Pues a estas horas no puedes ensayar.
- Voy a suspendeeeeeeeer. Buaaaaa, buaaaaaaa....
Y el examen de sociales sin repasar.
Niño a la cama, madre dando voces por toda la casa, niño llorando, y a las doce de la noche, vomitando la cena de puros nervios.
Así que ayer, y aprovechando que los viernes entro tarde a trabajar, a las siete de la mañana nos levantamos a repasar sociales, a terminar los deberes de lengua, y, como los vecinos no tienen culpa de nada, a las ocho cogimos el coche, aparcamos en un descampado, y nos pusimos a ensayar con la flauta.
Me espera un fin de semana parecido. Ahora mismo salimos corriendo a dos clases de música, y a hacer la compra.
¡Cómo te entiendo! Aunque normalmente no les suelo ayudar nada, cero, creo que soy una madre malísima. Además tengo la suerte de que, este año, como han cambiado el sistema, tienen que hacer un montón de "trabajos formales", pero los están haciendo todos en el cole. De hecho el peque (¡Gracias a Dios!) terminó los exámenes ayer, porque lo que le queda son dos asignaturas en las que las profes se han puesto de acuerdo y el trabajo es conjunto. Y a mi casa no ha llegado nada. Pero vamos, que también hay otra cosa que se llama recuperaciones, y de esas si tengo un par. Y como se lo merece décima a décima, me he puesto borde, y lo estoy pasando fatal.
ResponderEliminarLo de la flauta, tú precisamente no creo que tengas que preocuparte por eso ;) Mi hijo también empezó a tocarla más o menos con su edad, y yo lo veía y alucinaba, porque en mi vida lo he hecho. Y no te quiero contar la de veces que, por wassap (dichoso) me he enterado de exámenes, o deberes, o cosas así. Y como no quiero "ayudarle", es al peque, me he limitado a preguntar. ¿No tenías algo de X? Y a veces contesta con un "si, ya me lo sé", ¡ja!, y otras con un "nooooooooooo". Pero creo que con recordárselo, he cumplido mi función. Vaya, que ya iba a haber visto yo a mi madre así. Espero que algún día sepan valorarlo.
Bueno, ya queda menos (perdón por el tocho)
Sí, ya queda menos. A ver si termina el curso, que se nos está haciendo muy cuesta arriba.
EliminarBesos.
Yo aún no estoy en esa etapa pero si q pienso a veces eso de ser soltera, jaja, o lo de no haber procreado y mira q quiero a mi hijo más q a nada pero es q a veces entre tus propias obligaciones y las suyas ya no puedes más. Ánimo y un beso
ResponderEliminarA veces piensas que para qué tanto...
EliminarBesos.
Locura total jajajajajaja Ánimo 💪💪💪
ResponderEliminarGracias, guapa.
EliminarBesos.
Jjajajajajha me río porque me suena tanto...
ResponderEliminarSi ya es berenjenal el día a día,a final de curso es ya la locura.
Yo tengo a los tres músicos,con eso que te diga...
Y...hoy...concierto!
; )
Ánimo,ya nos queda menos.
Besos.
Me acuerdo mucho de ti y de tus tres músicos, porque yo con uno no doy más de mí misma...
EliminarBesos.
Totalmente identificada. Yo les adoro pero hay momentos en los que no entiendo por qué. Te puedes creer que me cansan más los mayores que la pequeña?. El cansancio de la peque es sólo físico y lo compensa con la alegría que da. Pero lo de los mayores tiene ratos de agotamiento mental y emocional. Según El Niño ya no tenía ni un examen más. Me acabo de enterar (no por él), que el martes tiene sociales. La mayor trae notazas y jamás la ayudo ni estoy pendiente, peeeero tiene un carácter que a veces me saca de quicio. Últimamente cada vez que les regaño por algo dice: estas fatal", y se pone con media sonrisa como pasando de mi.... Y brrrrrrr me pone mala que haga eso.
ResponderEliminarEn fin, paciencia y pensemos en lo bueno que tienen que es mucho.
Un beso Ro
Me creo perfectamente que te cansen más los mayores. Yo antes no dormía porque mi niño se despertaba cien veces, y ahora son las preocupaciones, y es peor...
Eliminarbesos.
Como te entiendo, en mi casa pasan cosas similares.El otro dia hablando con mi marido comentabamos q nuestros padres no estaban tan encima como lo hacemos nosotros y tambien que eramos mas independientes,recuerdo empezar el instituto con 13 años y yo me encargaba de matriculas , libros , comprar material,nadie me preguntaba por deberes....Ahora mi mayor tiene trece y para nada
ResponderEliminarMis padres tampoco estaban así conmigo, y claro que éramos más independientes, pero al final no sabes cómo hacerlo...
EliminarBesos.
Yo tengo más gana de que acaben que ellos, con eso lo digo todo
ResponderEliminarClaro que te creo. Yo creo que podría seguir un mes más siempre que mis hijos ya estuvieran de vacaciones.
EliminarBesos.
Yo tengo más gana de que acaben que ellos, con eso lo digo todo
ResponderEliminarAy. :/ Mucho ánimo, Ro :(
ResponderEliminarGracias, guapa.
Eliminarbesos.
Buff, me has leído el pensamiento, estos últimos dias también desearía seguir siendo el espíritu libre que era antes de ser mamá... Hay días muy duros en los que estoy de mal humor continuo, y eso no puede ser sano... En fin, que mucho ánimo!
ResponderEliminar