Hoy se me han pegado las sábanas. Este cambio de hora me mata, de verdad que no puedo con él. Mi cuerpo se resiente y me temo que, con lo cansada que estoy terminando el trimestre, los tres días que quedan de clase voy a ir arrastrada. Pero solo son tres días. Bueno, en mi caso son dos, porque el miércoles hay programadas actividades para toda la mañana: conferencias, competiciones deportivas, una carrera solidaria... Es decir, que casi casi estamos de vacaciones. No me voy a quejar porque muchas personas no tienen vacaciones por estas fechas, y este año en Castilla y León tenemos las vacaciones que me gustan: toda la semana de Pascua sin trabajar. Aquí los hosteleros, las cofradías y muchos padres han puesto el grito en el cielo, como cada vez que las vacaciones no coinciden exactamente con toda la Semana Santa, pero a mí me encantan así.
El trimestre se me ha hecho duro, ya me lo habéis oído decir en las últimas semanas, y creo que más duro en casa que en el trabajo, pero todo ha contribuido, claro. Y es que mi hijo mayor se ha puesto las pilas este año y está estudiando mucho. Y cuando digo mucho digo todo el trimestre sin descanso. Quiere sacar buena media en el Bachillerato para estudiar lo que quiere y se está exigiendo mucho. Ayer y antes de ayer salió pero llevaba sin hacerlo desde carnaval, o más lejos. Y el pequeño en su línea. Si estoy con él, de una hora de trabajo puede aprovechar cuarenta minutos. Si no estoy pendiente, no llega a diez minutos reales. Antes no era consciente del todo de sus propias limitaciones y siempre protestaba porque yo le azuzo para que estudie o haga los deberes y le voy poniendo plazos cortos a lo largo de toda la tarde (en quince minutos estudias esta página, cinco minutos para subrayar esto...). Pero ahora es cada vez más consciente de que si le ayudo la tarde cunde mucho más y me pide que estudie con él.
Sí, sé lo que podéis decirme. Yo era de las madres que pensaba que nunca estudiaría con mis hijos, que ese era su trabajo y que tenían que hacerlo solos. Y con el mayor eso fue relativamente fácil. Pero cada uno somos como somos y el pequeño aún se organiza mal, muy mal. Así que voy a estar ahí, porque puedo, porque tengo las tardes libres, hasta que sea necesario. Por eso ya os conté que en enero dejé el gimnasio: tanto el yoga como el zumba, y hasta he dejado de salir a caminar. Unos kilos de más lo atestiguan, pero creo que las prioridades están muy claras.
Como os decía, nuestras ganas de vacaciones en esta casa son máximas. Prácticamente lo estamos: este fin de semana ha tocado salir y cine, y relax en casa viendo la tele, jugando a la play y no haciendo nada, que es algo que está muy bien. Además, el viernes lo celebramos yendo a un concierto benéfico de la música de las pelis de Harry Potter, algo que estuvo genial y disfrutamos mucho.
Estoy enganchada a las dos agujas, tejiendo sin parar mi primer jersey, y he calculado la lana tan mal que ahora mismo me toca hacer un pedido para poder terminarlo antes de que llegue la primavera y se quede sin estrenar. Esta tarde empezaré otra labor, estoy pensando en cuál, para no perder el ritmo.
En fin, creo que eso es todo de momento. Ah, sí, tenemos preparados un par de talleres para estos dos días con nuestros alumnos, ya que en mi centro era una costumbre muy arraigada que este año han decidido suprimir y no entiendo por qué. Así que mis chicos mañana van a hacer pan con sus manitas y también vamos a preparar un vivero de plantas aromáticas y semillas de pequeños productos para la cocina del instituto. Ya os contaré con detalle cómo sale la cosa.
(Las imágenes del post de hoy pertenecen al fotógrafo Philippe Halsman, absolutamente maravilloso)
Ánimo, que en muy pocos días estarás de descanso! No imaginaba que en Castilla y Leon tomabais la semana posterior a Semana Santa de vacaciones. Sí tengo algunos familiares profesores que lo hacen así pero en la Comunidad Valenciana. Efectivamente, este cambio de hora primaveral es mortal y creo que nos afecta mucho a todos. Las fotos con las que ilustras tu post son geniales. El año pasado le dedicaron a este fotógrafo una retrospectiva en Madrid y fue fantástica. Qué genio y qué gran sentido del humor, dos cosas que, juntas, son explosivas! Te imaginas haber podido asistir a las sesiones en las que trabajó con Dalí? Vaya par! Un fotógrafo muy desconocido aquí y al que todos deberíamos acercarnos. Una delicia. Un abrazo y felices (y merecidas) vacaciones!
ResponderEliminarSilvia
Depende del año, cogemos la Semana Santa o la semana de Pascua, depende de cómo caiga. Pero a mí me gusta infinitamente más la de Pascua, porque es una semana entera sin fiestas.
EliminarMe encanta el fotógrafo, del que había visto cosas, claro, pero que no conocía y he estado investigando ayer.
Besos.
Ay, aquí en Andalucía moriríamos si las vacaciones no coinciden con la SS!!!
ResponderEliminarLo de estudiar con tu niño es porque él lo NECESITA, no tú, como pasa con otros padres. Siempre lo digo: dile a un niño diabético que aguante todo el día sin azúcar o sin comer, que a los demás no les pasa nada 😡
Me alegro de que el mayor vaya madurando tanto. Eso de que esté estudiando tanto motu propio... no sabes la suerte que tiene/s.
Sí, sí sé la suerte que tengo. Algunas noches nos acostamos mi marido y yo y la conversación gira en torno al cambio que se ha producido en él, que hace dos años estábamos desesperados y que ahora le tengo que mandar a dormir o levantarme con él pronto porque solo quiere sacar buenas notas.
EliminarBesos.
Estamos todos agotados y estos días finales ya son... pero a mí también me gustan más estas vacaciones.
ResponderEliminarEste cambio de hora me cuesta pero también prefiero este horario al que dejamos así que me compensa.
Me encanta cómo has dejado espacio a tus chicos cuando lo han necesitado y lo recuperas si lo demandan. ¡Besete!
Agotadísimos. Y más aún cuando ves ya la meta pero te quedan unos días para llegar.
EliminarLo de mis hijos, nunca sabes si aciertas o te equivocas, ya sabes. Es ir probando. El mayor está encaminado. Parece que ahora por fin sabe lo que quiere y va a por ello. Con le peque nos queda un largo camino.
BEsos.
Te entiendo perfectamente con lo del estudio de tu hijo pequeño, el mío acabó la secundaria porque me ponía con él a estudiar, le ayudaba con las matemáticas, que se le atravesaron, con el resto de asignaturas, solamente con mi presencia le valía. El 1 de abril se va a hacer las prácticas de un módulo de grado medio de FP a Eslovenia con un programa Erasmus y hasta hace 15 días como aquel que dice me decía que me sentara a su lado a estudiar, aunque yo me pusiera a hacer punto mientras. No creo que sea muy bueno, y muchas gente me lo ha hecho saber cuando lo contaba, pero a mi lo que realmente me importa es que estudie y si tengo que estar a su lado pues estoy, pienso que algún día será capaz de estudiar solo, porque no pierdo las esperanzas de que madure, a lo mejor a los 18 años que tiene ahora no, quizás a los 19 o a los 20 ...
ResponderEliminarMucho ánimo y no te rindas con él y a descansar esta Semana Santa.
Puff, el cambio de hora yo también lo llevo fatal. En Galicia tenemos toda la semana de vacaciones y el lunes. El martes es festivo en mi ciudad, así que tenemos un día más. Mucho ánimo!
ResponderEliminarUn beso, guapa :)
Voy tan retrasada con las lecturas que ya has ido y has vuelto! x)
ResponderEliminar