Esta semana está siendo una locura. Y solo estamos a martes.
Estoy preparando el viaje a Dublin. Afortunadamente, viajo con una compañera muy concienzuda y perfeccionista. Ahora digo "afortunadamente" y a lo mejor en unos días quiero suicidarme, pero me está viniendo muy bien porque está llevando el peso de los preparativos.
Pero también seguimos a vueltas con cosas de la cofradía. Mis hijos fueron apuntados a una cofradía del pueblo cuando nacieron, y ahora les toca, primero al mayor y luego el pequeño, ser mayordomos durante un año, con un montón de obligaciones. Por lo pronto, este fin de semana tenemos que dar un vino a los cofrades el sábado, el domingo por la mañana y el domingo por la tarde. El domingo mi mayor también tiene que hacer un brindis y pasarle el testigo por un año a su hermano. La semana pasada estuvimos limpiando la ermita, con un montón de gente del pueblo, que se presentaron voluntarios a ayudar, y este fin de semana, justo antes de salir para Madrid a coger el vuelo, pasaremos dos días fuera.
Por todo eso, el viernes por la noche o sábado por la mañana tengo que tener la maleta hecha, con todo preparado, y aún así me gustaría muchísimo estar tranquila antes del viaje.
Por si todo eso fuera poco, estoy haciéndome con uno de mis grupos, que me está costando bastante, mientras con el otro hemos estado pintando y decorando la clase, así que estos primeros días he estado totalmente arrastrada, con chandal viejo, camisetas viejas para pintar, de un lado al otro del instituto. Y he estado, por supuesto, preparando la tarea de mis alumnos para la semana que no voy a estar.
No os lo he contado aún, pero este curso voy a ser, ya soy, la coordinadora de convivencia del centro, un centro donde nunca pasa nada, con muy pocos conflictos y ninguno grave. Pues bien, ya hemos tenido un par de peleas, tengo un montón de gente nueva con problemas para integrarse y, lo más grave, el caso que os conté el otro día de violencia machista que afecta a una de nuestras alumnas. No montéis nunca un negocio conmigo, porque todo empezaría a ir mal en el primer minuto.
Vamos, que pones un circo y te crecen los enanos. Por lo menos no te aburres...
ResponderEliminarTal cual. Está la cosa así, pero los septiembres ya de por sí son complicados.
EliminarBEsos.
Respira... cuando se me acumulan las cosas, lo que hago es anotarlo todo en una lista en modo calendario, así no se me pasa nada que tenga que hacer y voy distribuyendo las tareas a lo largo de los días, para repartirlo.
ResponderEliminar¡Ánimo! y a disfrutar del viaje a Dublín.
Espero q tu peque ya esté mucho más recuperado.
Tengo listas y listas por todas partes. ES que tengo mucho que hacer, sin más, pero en breve irá disminuyendo la sensación de no controlarlo todo.
EliminarBesos.
¿Al final habéis pintado el aula? ¡¡¡¡cómo no te vas a cansa!!!!
ResponderEliminarMucha fuerza!!!
Merche
Aún estamos en ello. Nos falta todavía un poco.
EliminarBEsos.
Lo que importa no es el comienzo sino los resultados finales y están en buenas manos.
ResponderEliminarYo me apuntaría con los ojos cerrados.
Tú puedes!!!
Un abrazo
Coquelicot
Los resultados finales los veremos y os los contaré.
EliminarBEsos.
¡Venga Ro, de pesimismo nada! Es que todos los comienzos de curso son difíciles. Verás como en unas semanas está todo más tranquilo. Besos.
ResponderEliminarTodos los septiembres son difíciles, pero este se me está haciendo especialmente duro, y octubre va a ser también complicadillo.
EliminarBesos.
Uh.. bueno, no te puedes aburrir con tanta cosa!!! que salga todo bien.
ResponderEliminarMe llamó la atención lo de los cofadres.. claro, en una gran ciudad como Buenos Aires todo eso no existe.. suena divertido..
beso
No, no me aburro. Necesito un ratillo de aburrimiento en mi vida.
EliminarBesos.
Qué me vas a contar, nena. Yo estoy un poco histérica y desbordada ya. No te digo más.
ResponderEliminarAins. Pero eres lap ersona indicada. Seguro que lo sacas :D Ánimo.
Veremos... estoy un poco de los nervios.
EliminarBEsos.
Mucho ànimo!
ResponderEliminarTú puedes!
Besos