Re-hacer tu vida

Se trata de una expresión que se oye mucho, que en los últimos meses he oído constantemente, e incluso yo misma he utilizado. ¿Qué es eso de rehacer mi vida? ¿Cómo se rehace algo que está hecho?

La mayor parte de la gente, cuando utiliza ese verbo, está pensando en volver a tener una pareja. Y esa no me parece que sea la clave. Al menos no debería serlo. Tener una nueva pareja no es algo fundamental para que tu vida funcione y sea plena. La clave debería ser estar bien con uno mismo. Pero eso siempre es complicado. ¿Quién está contento, plenamente feliz, con su vida?

Rehacer tu vida creo que es empezar de nuevo, aunque nadie empieza de cero, sino que trae, afortunadamente, lo que ha aprendido por el camino. Y unos hijos (en mi caso), unas amistades, un trabajo, unos compañeros, unas costumbres... en ningún caso es volver a empezar.

Sí creo que durante estos meses estoy rehaciendo mi vida, al menos en cierta manera. Y eso significa pequeños y grandes cambios que van formando mis nuevas rutinas, que van haciendo mi nueva vida. El cambio en casa ha sido grande; lo está siendo, porque aún estamos inmersos en ello. Hemos pasado de ser cuatro, con unos horarios y costumbres, a ser dos, y todos estamos reubicándonos. Las rutinas de ambos están en plena transformación, y nos está costando un poco. Ahora solo tenemos al otro para llevarnos bien o para discutir, para lo bueno y lo malo.

Sí, estoy rehaciendo mi vida, pero no empezando de cero, sino aprovechando lo aprendido y lo que traigo de equipaje, que son cosas buenas y malas pero son mías. Espero que esto, como todo, también me sirva para aprender y madurar.