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Normalmente el resultado es peor que en los ejercicios de clase, que cuando salen a la pizarra, que cuando contestan a lo que les pregunto...
Entonces... ¿qué extraño poder hace que siga poniendo exámenes año tras año, evaluación tras evaluación?
Supongo que tiene que ver con cumplir con los criterios de calificación, con tener algo así como una prueba escrita que te quita responsabilidad sobre su aprendizaje y se la da toda a él. Suspende porque no ha estudiado, porque no ha trabajado lo suficiente y no porque el profesor no lo haya hecho bien. Y así tenemos una nota, un número, algo que pensamos que es lo que ese alumno se merece, aunque en muchos casos se merece una nota mejor que lo que demuestra en el examen. Bueno, a veces peor, pero son muy pocas veces...
Y esa nota, la nota que creo que tengo que ponerle, la que creo que merece al final, acaba apareciendo, por arte de magia, o por arte de:
- Un tres y medio, pero como trabajas en clase, haces los deberes, te leíste el libro de lectura y no sé cuantas cosas más, la nota media te da un cuatro con seis que redondeando acaba siendo un cinco.
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Sería mucho mejor decirle al chaval que ha trabajado, que se merece ese cinco y no hacerle pasar por un examen en el que muchas veces no es capaz de demostrar lo que sabe hacer.
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Ayer estuve corrigiendo mi grupo de segundo. Mi grupo que dentro de unos pocos días dejará de serlo, y que es de todo punto espantoso.
En todo el curso, y por más que les he retado, no he conseguido que en ningún examen los aprobados se cuenten con los dedos de más de una mano. Nada: tres, cuatro, dos, esa es la media. Y luego después de muchas consideraciones, acaban siendo ocho o diez, que ya es bastante, que para ellos es como si se lo regalaran, y que me deja insatisfecha, con ganas de pegar a alguien, pero no sé a quién.
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¿A mí misma?
Me parece tan complicado "valorar" los conocimientos, el trabajo y el esfuerzo de los demás en mi trabajo/vida diaria, que hacerlo sabiendo que es casi decisivo para su futuro me resultaría imposible.
ResponderEliminarEs muy difícil, y más difícil aún hacerlo bien.
EliminarBesos.
Solo he corregido exámenes "oficiales" una vez en mi vida: en esos 5 días que trabajé me tocó hacerlo. Me pareció una cosa super difícil. No había ni un solo examen "decente", lo que me hacía ser muy, muy benevolente con aquellos que al menos lo habían intentado. Creo que a muchos les regalé la nota, encima sin conocerlos...Pero no podía evitar calificar a la alza, creo que por simple desolación.
ResponderEliminarEn serio me dio más de un quebradero de cabeza semejante responsabilidad.
El hecho de hacer exámenes en sí, han de conocerlo y hacerlo, más que nada porque deben estar preparados para afrontar ese tipo de situación. Los exámenes de clase no son los únicos a los que les van a someter a lo largo de la vida, ¡son los menos! y en los que más tacto van a tener con ellos. Se creen que en la vida, una vez fuera del sistema educativo, se acabaron los exámenes y nada mas alejado de la realidad. Tienen que saber hacerlos, tienen que aprender a vivir esa tensión y esa presión, tienen que aprender a frustrarse y por supuesto deberían aprender a superarse...Qué bonito suena todo esto, pero luego ¡¡¡qué pasotismo hay!!! Puff, sí que dan ganas de pegar, jejejeje...sí.
Suerte!!!
Es muy complicado. Los exámenes, las pruebas, siempre existirán, pero hoy por hoy, con la realidad de nuestros alumnos, esos exámenes no dan como resultado la realidad. Así que algo hay que cambiar en todo este tinglado.
EliminarBesos.
Eso es porque ya no funciona el viejo paradigma, Ro...
ResponderEliminarUrge un nuevo sistema totalmente diferente basado en la no competitividad entre los alumnos y sí en la colaboración.Un sistema en el que el educador ayude a potenciar el genio interior de cada niño.
Sin embargo sabiendo todo esto,seguimos explotando a los niños con exámenes,con pruebas de competencias básicas.Los niños,ya,desde los 5 y 6 años están explotados sistemáticamente con ACL y mil pruebas más,cada dos por tres.
Nosotros,los educadores somos los que vemos la realidad en el aula..el cambio que tiene que haber ya.Las leyes están hechas por personas que no tienen nada que ver con la realidad en el aula.
Realmente queremos eso para nuestros niños?
Queremos ese tipo de sociedad para el futuro?...queremos ese futuro para ellos??
Parecemos autómatas haciendo lo que nos piden contradiciendo nuestros sentiemientos,nuesta manera de pensar...
El año que viene haré Primero y creo que la voy a montar,buena..
la voy a montar...
No tengo nada que añadir. Estamos totalmente de acuerdo. Yo también quiero cambiar, porque cada año voy cambiando pequeñas cosas pero no es lo que hace falta. yo también quiero liarla, montarla como tú. Y creo que es la única forma de hacerlo.
EliminarBesos.
El caso es que "te dejen"... pero hay que pelear. No nos rindamos.
EliminarEl problema de ese sistema es que es internacional y tenemos la absurda necesidad de igualarnos a otros países por sentirnos inferiores. Se presiona y estalla. ¿Inferiores de qué? Somos diferentes. Y la evaluación debe estar basada en el proceso de aprendizaje individual, no en la comparación de los resultados de otros países. Si a los demás les va bien, pues olé, pero cuando no funciona, hay que buscar alternativas. No podemos seguir forzando con algo que no va a ninguna parte.
No,a ti misma no.
ResponderEliminarA un sistema anticuado.
Opino como Blogosferia.
; )
Besos
Creo que los que estamos en este mundo o tenemos hijos lo vamos teniendo cada vez más claro, pero desde arriba el cambio no llega.
EliminarBEsos.
Yo no soy nada partidaria de los exámenes, no creo que demuestren nada
ResponderEliminarNo demuestran nada. No lo hacían antes, pero ahora mucho menos. Tengo unos alumnos muy válidos para muchas cosas y que en los exámenes no pasan de un tres. Algo estamos haciendo mal diciéndoles que no valen para nuestro sistema educativo unos chicos que, de verdad, son muy buenos en muchas cosas.
EliminarBesos.
Entiendo tu postura, pero yo, como alumna de notables y sobresalientes siempre me sentí muy frustrada.
ResponderEliminarEs cierto que aprendía rápido, y trabajaba poco. Pero sacar un nueve y medio en el examen y que no te pongan el diez en el boletín y ver que a tus compañeros les regalan dos y tres puntos, año tras año, año tras año...
No sé, ahora lo veo infantil, pero en su momento sufrí mucho por eso.
Hace unos años un alumno me demostró lo injustos que éramos habitualmente con los de mejores notas. A esos alumnos les escatimamos un 10, mientras que a otro que llega escasamente a un cuatro le ponemos el cinco. No lo había visto nunca así, pero es cierto, y desde entonces lo tengo muy en cuenta.
EliminarBesos.
No lo veas como algo infantil, te entiendo perfectamente y todavía en la universidad eso sucede. Yo siempre voy a por el 10, y luego hasta los más cazurros se llevan el 5. Es muy injusto. Todos se merecen la carrera igual que quien se esfuerza para merecerse la matrícula de honor. Mis compañeros que van a trancas y barrancas tendrán las mismas oportunidades que yo, que me he dejado la piel para que valoren por debajo. Mi nota más baja es un 6,9 y me han dejado un 6,9 en el boletín, que significa "aprobado". ¿Tanto les duele poner el 7? Eso ya cambia a "notable". Una décima. Bah. Es que, desmotiva mucho. Y en las escuelas pasa igual. A los alumnos con altas capacidades se les tiene desmotivados al 100% (en general).
EliminarPuffff... he contado hasta 10 y leer a mi prima me ha parado, claro que se me ha escapado un "ja, ya claro, no flipas tú ni ná"... yo que tú hacía origami con ellos, seréis más felices todos.
ResponderEliminarNo te voy a decir lo que pienso pq hoy estoy además meganegativa y además necesito otro café.
Besos reina mora.
Es lo que voy a hacer, trabajar por proyectos, algo que vengo haciendo en cada evaluación, pero voy a dejar, si puedo y me dejan, a un lado el libro y voy a trabajar por proyectos. El origami puede ser uno de ellos, o la encuadernación de sus propios libros de poemas favoritos, a que mola???
EliminarBesos.
Pues mira, yo echo de menos corregir exámenes, con el nivel de los míos, eso no hace falta, aunque lo bueno es que suelen aprobar todos, para qué pedirle peras al olmo.
ResponderEliminarNo te hace falta... jijiji. El nivel de los míos es para llorar, pero no se trata de eso. Creo que los exámenes nos sirven más a los profes que a ellos.
EliminarBesos.
Eso está claro, el caso es que también ellos necesitan autoevaluarse de vez en cuando, así que pensemos que nos sirven a todos.
EliminarEn mi escasa experiencia docente (alumnos de prácticas de Medicina), cuando llegaba la hora de evaluarles... daban ganas de hacer repetir la rotación al 90%. Bien porque no hubieran dado palo al agua (a veces, ni aparecido) o bien porque se interesaban tanto que te apetecía seguir con ellos más tiempo. Afortunadamente, con Bolonia llegaron las evaluaciones "objetivas", con una serie de ítems que tenías que ir marcando... desgraciadamente, creo que los mejores no quedaban bien reflejados con ese sistema (de hecho, además de la hoja de evaluación, con algún estudiante dejé en la secretaría del Departamento una nota reflejando el buen aprovechamiento de las prácticas... por si les servía de algo a la hora de modular la nota final).
ResponderEliminarTambién me ha tocado varias veces evaluar en la ECOE de fin de carrera (Evaluación Clínica Objetiva y Estructurada), en una estación práctica donde debían realizar una serie de procedimientos... y ahí no vale nada más que lo que has hecho o no, la evaluación se rellena con crucecitas y yo soy demasiado "formal". Sé que algunos lo hacían peor de lo que sabían porque estaban muertos de miedo, nervios, vergüenza, les intentas crear un ambiente cómodo, pero...
¡Qué difícil es evaluar de forma justa!
Es muy difícil, y el tema de la rúbricas, de los cuestionarios para rellenar con X, siempre me deja mal sabor de boca. Eso no es todo de uno de mis alumnos, y por supuesto tampoco lo es un número.
EliminarBesos.
Uy, deseandito estoy de que terminen ya de una vez, a ver si no me llevo ningún disgusto, y la verdad es que nunca me he puesto en el lugar del profesor. Se me ocurre que podrías dejarles material para los exámenes; aunque en mis tiempos eso significaba "muérete, eso significa que no apruebas de ni coña", ahora a lo mejor les sirve de apoyo para demostrarte lo que saben hacer. No sé, por decir algo...
ResponderEliminarYo también, por el lado de madre, estoy deseando que terminen de una vez. No veo el momento de estar ya de vacaciones. Están muy cansados.
EliminarY creo que un trabajo, un test, muchas cosas, sirven para mostrar lo que saben de otra manera mucho mejor, que les haga aprender de verdad.
bEsos.
Eso es lo malo. Si suspenden el exámen y empiezas a dar explicaciones tipo: como te has leído esto, y has hecho lo otro, y nosequé, tienes tal nota, que te da para un 5... Pues que se creen que se lo estás regalando. Eso a no ser que marques unos criterios de evaluación súper matemáticos y empieces a sumar y hacer medias (un coñazo xD). A veces pienso que si no hubiese examen y se lo jugasen todo en el trabajo de clase, currarían más y no tendrían la sensación de que les "regalas" las cosas. Además a lo mejor se desmotivaban menos, porque jugárselo al examen...Pero claro, ¡a saber! Y desde luego, al final tendrán que enfrentarse a exámenes (bien selectividad, bien reválidas, o lo que sea) y les pillará de susto. Porque claro, hay que educar y demás, pero si no preparas para cosas como esas pruebas pues... ¡A ver por dónde tiras!
ResponderEliminarNo creas, que yo tengo el dilema, ¿eh? A mí los exámenes en filosofía no me convencen nada. Si encuentras la solución, cuéntamela, ¿vale? :P
Va a ser complicado. Si la solución estuviera ahí mismo, seguro que habríamos dado con ella. Pero es que no sé cómo hacerlo, pero cada año me siento más insatisfecha al final del curso.
EliminarBEsos.
Supongo que tienes toda la razón y sería bueno pasarse de ellos, pero creo que son como un aprendizaje de la vida, en la que a veces en un momento te juegas mucho y poco vale lo de antes o lo de después. Esos chavales se tendrán que ver en algún momento en una presentación, una entrevista, etc... Y por muy injusto o frío que resulte el momento y el resultado es lo que vale...
ResponderEliminar¡Qué suerte tienen contigo!
¿Qué opinas pues de los informes PISA y que estemos muy por debajo de la media? A parte de que un único criterio de evaluación para un tan amplio rango de personas tan distintas es un completo error... pero, ¿qué pasa aquí? ¿por qué cuesta tanto? ¿por qué hay niños con tantos problemas de aprendizaje? Sé que la metodología influye mucho, pero va más allá. Hay alumnos que con que les expliques magistralmente cualquier cosa, la captan al momento, ya les queda en un cajoncito. Pero es un muy pequeño porcentaje. Te molestas en desarrollar técnicas motivadoras, actividades experimentales, aplicaciones reales... pero aún así, presentan dificultad.
ResponderEliminarTambién creo que la manera de educar en las familias ha cambiado estrepitosamente... ¿qué opinas tú, que tienes más experiencia?
No soy profesora, pero sí estudiante, y cada vez estoy más descontenta con el sistema de evaluación utilizado. Cuando era pequeña no me lo planteaba; ese era el método para valorar mis conocimientos y punto pelota. Pero, según voy creciendo y analizando las cosas desde mi propio punto de vista, me doy cuenta de que no me parece una manera de evaluar adecuada. En fin, este tema da para muchas largas conversaciones, pero resumiendo: estoy de acuerdo con lo que dices.
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