Sí pido, y tengo que aclararlo, que lean en casa, y también algún trabajo de investigación o monografía pero con tiempo para preparar, tiempo para que se organicen y nunca en fechas cercanas a exámenes. Ay, los exámenes, no sé por qué nos quejamos tanto de los deberes y nada de los exámenes, pero en fin...
Sabréis que se ha convocado para noviembre una huelga de deberes por parte de colectivos de asociaciones de padres y que se quiere presionar de esta forma a los profesores para que no manden deberes, al menos los fines de semana.
Este curso los profesores de mi hijo pequeño han empezado muy suaves con los deberes. Ya os he contado otras veces que mi hijo, y no solo él sino la mayoría de los niños de su clase, no hace otra cosa que deberes y más deberes, cada día una media de tres horas de ejercicios sin más, que muchas veces no corrigen ni se los miran.
Y luego están las vacaciones. Mandar deberes para las vacaciones, sobre todo en las de Semana Santa, que son tan cortitas, me parece una maldad como otra cualquiera; para los niños y para los padres, que no se pueden ir a ningún sitio porque sus hijos tienen deberes que hacer y muy poco tiempo para terminarlos.
Y entiendo que este tema de los deberes no estaría a debate si no hubiéramos llegado a unos límites. Porque en mis tiempos (parezco la abuela "cebolleta") yo tenía deberes, pero muy pocos, el día que tenia muchos podía estar, con la edad de mi hijo, una hora sentada, pero normalmente era algo que se manejaba en media hora. Y a mí esos deberes no me parecen mal, porque cualquier niño tiene media hora para dedicar a repasar, a hacer unos ejercicios, a pensar un problema...
Lo que no comprendo es qué pasa cuando todos los ejercicios del libro se hacen en casa. Entonces... ¿qué se está haciendo en el colegio? Y os hablo del caso de mi hijo y su clase, no de algo ni remotamente lejano.
Os aseguro que, siendo profesora de secundaria, y teniendo menos horas de mi materia que las que tienen en primaria, mis alumnos hacen los ejercicios en clase (no todos los del libro, pero sí una gran mayoría), nos da tiempo a hacer debates, trabajos en grupo (también en clase), proyectos de investigación (por supuesto, en el aula), y a dedicar una hora a la semana a leer en alto.
¿Qué pasa entonces? ¿Es que soy más lista? No, es que exlico mucho menos, porque creo que en los tiempos que corren el conocimiento está a un click, a veces los profesores debemos hablar menos y dejar que los chicos aprendan por sí mismos. Si queréis leer algo escrito por alguien que sabe mucho de esto, os recomiendo este artículo de mi compañero Toni Solano titulado: Explicaciones, las justas.
Yo soy antilibros y antideberes, así me he presentado este año en clase.
ResponderEliminarLo sé, y ya lo hemos comentado otras veces. Yo me he ido haciendo antideberes con el tiempo, y cada día soy más antilibros. ESte año me está suponiendo mucho trabajo, pero por fin estoy teniendo los libros y apuntes que quiero: los que realizo yo y mis alumnos con su trabajo.
EliminarBesos.
Dos preguntas que me hago?: ¿Cual es el motivo de mandar los debereres? Igual que tu tienes tu justificación pedagógica para no mandarlos, ¿cual es la de los que creen en ellos? (no es ironía, es que nunca la he escuchado)
ResponderEliminarY otra pregunta que me hago: ¿se debate sobre ello porque los deberes y la responsabilidad de los mismos cae en los padres?
Sin pensar que cualquier tiempo pasado fue mejor, imagino el contexto de cuando yo iba al cole y hubiera tenido muchos deberes, no veo a mis padres ni a los de la época en general recogiendo firmas para que los quitaran.
El motivo principal para mandar deberes es afianzar conocimientos y adquirir hábitos. Dicen que para aprender matemáticas, o sintaxis, hay que practicar,y no se puede hacer en clase. Yo no estoy de acuerdo del todo, pero sí me parece cierto que llegados a cierto nivel, como el bachillerato, es importante el trabajo personal. No lo es tanto, al menos para la mayoría de los alumnos, en etapas tempranas, pero dicen que es la forma de acostumbrarles al estudio diario, al hábito.
EliminarY sí, se debate porque ahora mucha responsabilidad de los deberes recae en los padres. Si no estás en casa y no puedes ocuparte de los estudios de tus hijos, es muy probable que estén condenados al fracaso, porque el sistema ha ido derivando en eso, y eso no está bien. Pero claro que los padres de ahora no son como los de antes.
Besos.
Yo soy antideberes y antiexámenes, ya lo sabes.
ResponderEliminarY no creo que cualquier tiempo pasado fuera mejor, yo tenía 3 horas de deberes de media al día, que no servían para nada, por eso los odio tanto.
Beso!
Marialu
Mi experiencia fue con muy pocos deberes, la de mis hijos con muchísimos. Desde leugo prefiero la mía, y estoy de acuerdo contigo en que no sirven para nada.
EliminarBesos.
Yo en estos momentos no sufro ese problema porque los dos años que lleva mi peque en primaria la tónica ha sido siempre la misma el día que traía algo era porque no lo había terminado en clase, para casa no mandaban nada. Tengo que decir que ha tenido maestros distintos en cada curso, pero ambos con la misma ideología y me parece un buen sistema, trabajas en casa si te encantas en clase; si no, la tarde es para jugar.
ResponderEliminarPor otro lado, estoy contigo y me pregunto por qué sólo nos hemos fijado en los deberes y no tanto en los exámenes, nunca entenderé lo de jugártela a un carta independientemente de lo que te hayas esforzado el resto del curso. En fin que me enrollo.
Besos.
A mí eso que dices me parece bien. Si un alumno no hace lo que se supone que tiene que hacer en clase, es normal que lo lleve para terminar a casa.
EliminarYo tampoco entiendo mucho los exámenes. Normalmente en ellos los alumnos dan mucho menos de lo que pueden. Yo ahora hago un montón de pruebas, no digo que a diario, pero casi a la semana, de distinto tipo: exámenes, pruebas orales, de redacción, trabajos en casa,trabajos en clase... todo ello con el mismo valor, y de esta forma creo que la formación es más integral y cuando uno no destaca en algo puede hacerlo en otra cosa. Mis compañeros se llevan las manos a la cabeza. ¿Cómo puede valer igual una redacción que hacen en clase en media hora que un examen de sintaxis? Considero más útil la redadcción, sinceramente. Y le voy dando el mismo valor a pruebas muy diferentes. El año pasado con este método aprobaron la gran mayoría de mis alumnos. Y trabajaron creo que más que nunca. Al menos eso dicen.
Besos.
Besos.
Sí, tema a debatir donde los haya.
ResponderEliminarTengo dos hijos, la mayor siempre ha tenido deberes para aburrir, el peor año: 3º de primaria. Mi hijo pequeño, sin embargo, apenas tiene deberes. Lo cierto y verdad es que me dice que los termina en clase.
Creo que los niños deben habituarse paulatinamente a trabajar en casa o a estudiar para los "famosos exámenes". Hacer ejercicios y no corregirlos es perder el tiempo, no saben si están bien o están mal.
Me parece bueno el método que sigues, leer y hacer trabajo de investigación. Hoy precisamente tenemos reunión con los profes de la ESO (ya te contaré...)
En cuanto al artículo que nos recomiendas, te puedo contar que en mis tiempos de estudiante, en 3º de BUP, ha llovido un universo entero, sólo trabajamos con tres libros: El Lazarillo, La Celestina y La Regenta, uno por cada trimestre, no hubo más; tuvimos que presentar un trabajo por cada libro. Jamás lo he olvidado. Tuve suerte con mis profesores de lengua y literatura.
Yo no he tenido en BUP ningún libro de literatura, salvo los de lectura, y no creo que eso me fuera mal, porque terminé estudiando esa carrera.
EliminarBesos.
Deberes si, deberes no, eterno debate. Para empezar te digo que hay que ver cómo he cambiado yo misma de opinión. Cuando mi hija mayor era pequeña, yo era pro-deberes total, y ahora que se me ha pasado la época (casi), me he convertido en todo lo contrario, y si hay que apoyar la huelga, se apoya.
ResponderEliminarUn apunte respecto a la diferencia exámenes/deberes. En nuestro cole hay fijado un porcentaje de la nota final correspondiente a distintos aspectos: examen, actitud, trabajo realizado... Y te aseguro que conozco casos de niños que han sacado un 7 en el examen y han llevado un 10 en la nota, y al revés, niños con un 7 o incluso más en el examen, y un 5 de nota.
Y en cuanto a lo de explicar... pues tal y como se están planteando ahora las cosas, me parece muy bien. El problema es cuando a tu hijo le mandan estudiar algo que, en clase, la profe "ha leído", literalmente. Y ahí se nota (entre otras cosas) cuando un profesor es vocacional o no. En mi caso, a veces han llegado como te digo, sin tener ni idea porque no habían entendido nada (y no se lo habían explicado), y otras, con otros profesores, en los que apenas tenían que repasar, porque el/la profe le había puesto tanto entusiasmo en clase, que salían sabiéndoselo perfectamente.
Me gustan muchas cosas del colegio de tus hijos. Yo nunca diría algo así como: esto os lo preparáis por vuestra cuenta que os lo pregunto en el examen. creo que en el principio de los tiempos, cuando empezaba en esto, quizá lo dije alguna vez, o di algo por explicado, no lo recuerdo, pero eso no sirve de nada. Hay que trabajar en clase, con ellos, ver si lo entienden, volverlo a explicar si no, hacer más ejercicios si las cosas no funcionan, ir más deprisa si ya lo tieenen dominado...
EliminarBesos.
A mi como madre, sinceramente, lo que más me rompe es pasar de 0 a 100 de un curso a otro. Porque el año pasado no teníamos vida y era una tortura diaria con los malditos deberes y de eso hemos pasado a no tener nada de nada...No sería más fácil poco y constante?
ResponderEliminarEstoy de acuerdo. De repente empiezan un curso o con un profesor y empieza una tortura que dura un año o dos o los que sean. Un poco de trabajo, ya digo que media hora, no viene mal, siempre que no sea más que eso, y nos estamos pasando mucho.
EliminarBesos.
Totalmente de acuerdo contigo, en todo.
ResponderEliminarPor cierto, unas fotos preciosas las que acompañas al texto, me han inspirado para la habitación de Clara
Estoy con un ordenador que no es el mío y no he podido poner enlaces a las fotos como siempre hago...
EliminarBesos.
No puedo estar más de acuerdo contigo!!! Lo de las tres horas de deberes que has comentado, es precisamente algo que me contó ayer un padre de tercero de primaria que me dejó con la boca abierta....tres horas de deberes se había comido la niña el lunes!!!! me parece una aberración...
ResponderEliminarBesotes
Mi hijo está en sexto y este año de momento vamos suaves, pero lleva tres años de mínimo dos horas de ejercicios todos los días, y más los fines de semana. Y no lo entiendo. Y luego está el estudio, y poner un examen y dos hojas de ejercicios el mismo día, la misma profesora.
EliminarBesos.
deberes cansinos no... lectura, investigación, repaso, sí!
ResponderEliminarque los niños también tienen que conciliar los estudios con la vida!