Libros de abril

 Abril ha sido un mes muy largo. Muy muy largo. Se ha ido complicando todo en el instituto, desde el día que volvimos de Semana Santa, y ha habido semanas que han durado aproximadamente un año, o más.

Aún así, he tenido tiempo de leer y he leído algunas cosas que me han gustado y que me han dejado huella. Lo que apenas he tenido es tiempo de pasarme por aquí. Pero vuelvo. Siempre vuelvo.

Empecé el mes con Hamnet, una lectura maravillosa que me tuvo unos días enganchada durante las vacaciones. Ya os hablé de esta fantástica novela.

También me habían prestado un libro ilustrado de Murakami, un relato breve, y me lo leí antes de regresar de las vacaciones. No es de lo mejor que he leído suyo, pero es Murakami, y siempre me gusta.

También, y todo mezclado, que es ese momento en que todo lo que leo me gusta y no puedo dejar de leer, he leído Una chica es una cosa a medio hacer, que me ha fascinado. Una escritura experimental, que te mantiene muy atento a la lectura, y una historia tremenda.

También, y a ratos descansando de Hamnet y a ratos leyéndolo en cualquier sitio he disfrutado muchísimo de la lectura de Un verdor terrible. Una lectura a caballo entre el ensayo y la ficción. Increíble lo que me ha gustado. Y no soy nada de ensayo.

También, a la vez que los anteriores he leído un libro que tenía pendiente desde hace tiempo: Canción de Eduardo Halfon, autor al que adoro cada día más.  En realidad esta novela la he terminado ya en el mes de mayo, ayer mismo.

Mi chico leyó La lluvia de Ionah y me  lo dejó encima de mi pila de libros pendientes, lo puso el primero insistiendo en que lo leyera ya y eso hice. Y también me ha gustado mucho. Ha sido un mes de muchos aciertos, por lo que veis. Y he disfrutado mucho de los pocos ratos que he tenido para leer.

Así que el recuento dice que han sido seis libros en este mes, que teniendo en cuenta lo ocupada que he estado, no han estado mal.