Hoy es un miércoles cualquiera y sin embargo no lo es.
Desde que estoy en mi nuevo centro, cada día es diferente porque la gente con la que me rodeo los hace especiales. No solo por los alumnos, cuya complejidad hace que no haya un solo día aburrido. Los compañeros, especialmente el equipo que hemos formado, hacen que una se levante con ganas de ir a trabajar y, aunque termine la jornada cansada, a veces exhausta, hacen que merezca la pena.
Hoy no es un día cualquiera porque ayer tuvimos las elecciones al consejo escolar y salió todo mucho mejor d eoi previsto. Porque trabajamos hasta las cinco de la tarde, y me había levantado a las seis, pero las cosas funcionaron como debían y eso siempre es una satisfacción.
Hoy es un día especial porque voy a llevar a mis compañeros cruasanes recién hechos para celebrar que seguimos en la brecha y que todo funciona.
Hoy es un día especial porque todos los días lo son y porque quiero vivir la vida así, no como si cada día fuera el último, sino como si cada día mereciera la pena vivirlo intensamente.
Me alegro muchísimo por ti y por todos los alumnos. Eso se contagia más rápido que cualquier virus. Un abrazo para ti y los tuyos. En especial para tu madre. En su día no pude comentar porque se me arrasaron los ojos. Salud y fuerza.
ResponderEliminar¡Que bien!...que gusto que vayas a trabajar con ganas, eso es media vida.
ResponderEliminarLa especialidad de lo cotidiano.
ResponderEliminarAún recuerdo al compañero ese tan maleducado (y pestoso) de hace dos o tres años. Qué bien que estés contenta.
Besos!
¡Me alegro mucho! Yo me uno porque por una vez en la vida, en tutoría nos han dicho que todos los profesores están muy contentos con mi hijo y lleva muy buenas notas. Parece que hemos tenido que llegar al último curso para desterrar el "puede esforzarse más" dichoso.
ResponderEliminarP.D.: ¡Me hubiera gustado probar los cruasanes!