Julio ha sido un mes poco lector. Muy poco para lo que estoy acostumbrada.Y os diré por qué. Todo iba más o menos como siempre. Y luego nos fuimos de vacaciones y he leído poquísimo, pero disfrutado mucho de otras cosas.
En fin, que aquí va mi resumen:
Mi mes empezó leyendo La herencia, una historia que cuenta, con una frialdad a veces exasperante, hechos bastante complicados de la vida de una familia.
Después mi chico estaba leyendo La sala Marte, y me lo dejó antes de devolverlo a la biblioteca.
Durante los días de playa leí La forastera, un libro que me gustó mucho, el que más del mes.
Y ya de vuelta a casa después de los días de descanso, he terminado La nena, por terminarlo porque no me ha convencido.
Aún me ha dado tiempo a leer un pequeño libro que no por breve es menos intenso. Teoría de la gravedad, de Leila Guerriero. Una maravilla.
En total, cinco libros, que no está mal aunque no sea lo que acostumbro durante las vacaciones. Supongo que le confinamiento me ha acostumbrado a otras cifras...
No je leído ninguno y q buena pinta
ResponderEliminarCreo que este año batirás un nuevo record, así que si en verano aprovechas para hacer otras cosas, bienvenidas sean! :D
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ResponderEliminarLa nena: terrorífico.
ResponderEliminarMe quedo con el primero. Que me gustó mucho. La red púrpura me hizo pasarlo francamente mal. Y con este ya rematé. Para algunas cosas soy en extremo miedosa o sensible, no se...
En fin, será por lecturas. Y re(ro)comendaciones...