lunes, 26 de mayo de 2014

Un pringao

Siempre tiene que haber un pringao en cada clase.

Y en esta ocasión le había tocado a él.

Ya en infantil, nadie quería jugar con ese niño. Y es que era el bebé de la clase, lloraba por todo, nadie soportaba sus llantos continuos, su inmadurez,...

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Después, poco después, empezó a pegar a todo el mundo. No era algo normal, una etapa, era más que eso. Pegaba para relacionarse, pegaba porque nadie jugaba con él, pegaba porque era su forma de decir: "aquí estoy, no os olvidéis de que existo".

Después dejó de pegar, pero siguió siendo el tonto de la clase.

Sus compañeros le llamaban "el rey de los tontos". No sé si en algún momento fue divertido para alguien. Después de un par de años de repetirlo, no me parece que tenga demasiada gracia.

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En las excursiones él era el impar, el que se sentaba al lado de la maestra, el que no compartía juegos y risas con los demás.

- ¿Qué tal?, ¿lo has pasado bien?

La respuesta, siempre un sí distraído.

El colegio se fue convirtiendo en un mal menor, o mayor, quién sabe, un mal con el que no tenía más remedio que convivir cada día, aunque pasara la semana deseando la llegada del viernes.

El curso pasado quisieron cambiarlo de colegio. Llevarle a un lugar donde dejara de ser el pringao y pasara a ser algo así como "el nuevo". Pero a sus padres les dio miedo cambiarle de lugar y conseguir solo cambiar de sitio los problemas, que volviera a ser otra vez el tonto de la clase en un sitio nuevo.

Las cosas mejoraron. Le llevaban al parque cada día a jugar con sus compañeros de clase que, bajo la atenta mirada de padres y más padres, llegaban a compartir sus juegos con él. Y parecía que aquello funcionaba.

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Un día recibió una llamada de un compañero para que fuera a jugar a su casa. Y a esa llamada siguieron otras, algunas invitaciones a casas y a fiestas de cumpleaños.

Todo parecía mejorar.

Pero solo era la superficie. Porque... ¿qué es una clase sin un pringao, sin alguien con quien meterse?

Así que en el parque sucedía una cosa y en el colegio otra, se imponía la ley del grupo, y ahí todos conocían su papel.

Y un día, tiempo después, una de las niñas de su clase, quizá una de las más queridas por todos, le hizo la siguiente pregunta:

- ¿quieres ser mi novio?

Y él tuvo la no muy feliz idea de decir que sí.

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Una tontería infantil sin importancia.

Pero eso no podía ser, eso transgredía las reglas de la clase. No podían dejar que el pringao se saliera de su papel y dejara de serlo.

Así que se fueron todos de excursión, un jueves cualquiera.

El juego consistía en no dejar que él lo disfrutara, en no dejar que jugara con nadie, en molestarlo y cansarlo y, sobre todo, no dejar que se acercara a ella.

Volvió con mala cara. No hacía falta preguntar si se lo había pasado bien.

Apenas contó nada.

- Es que los de mi clase no paran de molestarme, y pegarme.

Querían incluso seguir pegándolo al bajar del autobús, delante de su padre.

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Y al día siguiente continuó la broma, que consistía en acorralarlo en el patio, en no dejarlo jugar, en no dejarlo acercarse a otros niños, en dejarlo solo.

Y él se zafó como pudo y se metió en el baño. Allí pensó que estaría a salvo, pero alguien dio una patada a la puerta y se la dejó marcada en la frente.

Son niños. Sólo estaban jugando. No ha sido culpa de nadie.

En los últimos días, por primera vez, a veces, al cerrar los ojos y pensarlo, aparece en mi mente, débilmente, la palabra acoso. No es una certeza, solo algo que asoma en mis pensamientos. Al fin y al cabo, siempre tiene que haber un pringao con el que meterse ¿no?

Lo malo, lo peor de todo,  es que ese pringao sea tu hijo.

47 comentarios:

  1. Jo...yo así desde fuera sí lo veo como un síntoma de acoso.
    Mucho ánimo.

    Quizá el cambio de cole le venga bien.Aunque no sé,tú sabes mucho de estos temas.

    Un fuerte abrazo.

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    1. No sé nada en este momento. Lo estoy pasando muy mal, a lo mejor es más lo que me imagino que lo que es. Y necesito perspectiva.

      Besos.

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  2. Ro ! Que historia más horrible! Odió las etiquetas en todo y más en los niños! La mayoría de las veces somos los propios padres los que etiquetamos. Siento mucho lo que debes estar pasando. Un abrazo.

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    1. Gracias. Ahora mismo sólo tengo ganas de llorar y no levantarme de la cama.

      Besos.

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  3. Es acoso...A pesar de saber del tema, cuando esta tan cerca de una es difícil abordarlo. Queda poco tiempo de curso y el verano es un buen momento para replantearse cambios. Quizás sea bueno. Supongo que le cole ya lo saben y, ellos también, deberían plantearse cambios.
    Besos y ánimo.

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    1. En el cole valoran como muy positivo lo que ha ido mejorando la relación con sus compañeros. Y yo, pero no sé hasta que punto. Necesitamos que las cosas se vayan tranquilizando.

      Besos.

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  4. Mierda!
    Me estoy volviendo experta en estos temas. Y me duelen muchísimo. Hay de todo. De todo en cuanto niños, en cuanto a padres, en cuanto a profes...
    Solo puedo decirte que los casos que he tenido han tenido de mí mi 100%. Así me ha ido después, pero mira, siempre he hecho lo que he creído justo. He tenido que abrir protocolos de la Consejería, seguimientos, bueno.... un trabajo indecible, pero más que nada, lo fuerte es lo emocional, y el sufrimiento de niños y padres.
    También te digo que alguna vez he terminado yo sola ante el peligro.

    Cambiar al peque de centro.. bueno, pudiera ser pero también te digo que no siempre es la solución. A veces, los problemas van diluyéndose conforme crecen y toman las riendas de su vida, que puede que no sea hoy, ni mañana, pero sí al curso que viene, después de las vacaciones de navidad...

    Paciencia, seguro que es un apalabra que estarás odiando desde hace años, lo sé.
    Y el que tú te dediques a lo que te dedicas, por un lado, beneficia, pero por otro... te amarga mucho más, te lo digo yo!

    YA queda menos para el final de curso, sí, y tal vez el peque recupere tranquilidad, y pueda planificar su estrategia para el curso que viene (planificar se planifica sin la intención de hacerlo, yo creo que es un mecanismo de defensa propio que se desata cuando menos lo esperamos...)
    He visto a mis chavales evolucionar, y también he visto a los acosadores convertidos en acosados, he visto acosados que en realidad no lo era si no que eran un reflejo de las inseguridades de sus progenitores, he visto acosados de verdad, he visto niños crueles, he visto de todo...
    Mucha sangre fría, Ro, paciencia, cariño, que no sobreprotección, empatía con todo el mundo, y sobretodo, hacer que te sientan, que estás y que no miras para otro lado, con respeto y cariño....
    No sé para qué telo digo, porque estoy segurísima de que es lo que haces, hacéis.
    Ánimo y mucha suerte, los "pringados" dejan de serlo, solo hay que pedir que no hagan pagar sus sufrimientos de la misma manera, sino que sean empáticos y soilidarios, que aprendan de su propio sufrimiento, puesto que de lo malo también se saca bueno.

    Buen lunes y buena semana!
    Hala, una sonrisita!
    Mis chicos en Inglés, yo corrigiendo un poco y con este mini recreo para mandarte un abrazote!
    ;)

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    1. Pienso, siempre he pensado, como tú, que debe aprender a defenderse. No a pegar, sino esas estrategias que todos aprendemos de no dejar que nos piden, de hacer como sí no te importa cuando se meten contigo... A ver como se nos da la cosa. Los padres de esos niños son padres normales, que saben como lo estamos pasando y que se preocupan. Intento que El Niño lo lleve como pueda, y no voy a saber si lo estoy haciendo bie o mal. Eso es lo malo.

      Gracias.

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  5. Me parece increible, nunca he podido entender como se puede justificar eso por parte de padres y profesores, el último caso que conocí en el insti al que voy todas las semanas se solucionó con mediación por parte de la orientadora, los padres del acosado querían castigo ejemplar pero al final prevalece el consenso, la convivencia, el perdón...entiendo que debe ser lo mejor, pero cuesta tragar, no voy a decir que imagino por lo que estás pasando, debe ser muy duro para imaginarlo siquiera. Solo muchos ánimos y abrazos virtuales para toda la familia.
    Besos

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    1. Está orevaleciandonla convivencia, y me lo estoy tragando todo. Llevo todo el fin de semana esperando una llamada de los padres implicados. No ha llegado, quizá porque los hijos no se lo han contado o porque no le han dado importancia. Pero lo van a oír, van a escuchar la versión de mi hijo. Es lo menos que puedo hacer. Acabo. De llegar y me lo encuentro cada día más triste, hoy también ha habido insultos. No quiero pasarme de frenada, pero esto no va a quedar así.

      Gracias.

      Besos.

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  6. A nadie le gusta sentirse el pringao de la clase, porque aunque no haya agresiones, el hecho de que no te dejen jugar es ya acoso psicológico y si lo que dices es que lo acorralan, eso ya es acoso de verdad. Y si intentaron pegarle delante de tu marido y entiendo delante de otros padres, los padres de sus compañeros dejan mucho que desear como personas. Yo por desgracia, con lo que has contado me identifico con tu hijo, porque a mí me pasó, no dejes que vaya a más.

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    1. Gracias. Esto está yendo a menos. Eso creo, al menos. Pero está siendo duro, y no sé lo que voy a aguantar porque El Niño tiene ratos en los que sufre. Luego, como niño que es, se le pasa y no le da importancia o no se acuerda.

      Besos.

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    2. Si necesitas algo, envíame un correo diminutaymagica@gmail.com

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  7. Ro! Mucho ánimo!!!! Un hijo duele mucho (esa frase es de mi madre). No se, suena un poco acoso, aunque lo mismo tu hijo no lo vive de esa manera... ¿Por qué no lo cambias de colegio?. En mi clase, había una niña que vivía una situación parecida. Me acuerdo de las perrerías que se le hacía, y pienso qué vergüenza de compañeros tenía... En fin, se trasladó de ciudad, y de colegio por tanto, y se que fue muy feliz. Su vida cambió por completo. Tampoco me hagas mucho caso. Es que estos temas me ponen de mala leche. Mil besos!!

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    1. Lo del cambio de colegio es difícil. Lo pensamos el curso pasado, y sé lo planteamos a él. Lo pensó, le dimos los pros y los contras, pero dijo que no, además nos pilla al lado de casa, y su hermano lo lleva camino del insti. Un cambio empeoraría mucho los horarios de todos.

      Besos.

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  8. No tía, no...vete allí y mata a alguien. En serio te lo digo. Cámbialo de cole y que les den morcillas, esq alucino!! Estoy triste e indignada a partes iguales, revélate!
    Si necesitas hablar cuenta conmigo, en serio, para lo que necesites.

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    1. Gracias. Es un tema muy complicado y que no es nuevo de hoy. Son muchas cosas que tiene que ver con que mi hijo no se adapta bien a los demás, pero es un aprendizaje por el que está pasando que nos está resultando muy duro.

      Besos.

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  9. ¡Que duro! Siempre he sentido que en esa edad ellos son terriblemente vulnerables... al daño infligido por los que en teoría en esa edad son refugio y pilar en su vida. Cuantas veces te habrás planteado que estas cosas también fortalecen... pero el hilo es tan delicado y nunca sabemos cuanto serán capaces de aguantar.
    Imagino como te mina esto por dentro, y que difícil es tomar decisiones tan delicadas.
    Un beso enorme es lo mejor que se me ocurre enviarte, para elevar un poco si cabe tu animo.
    Flori.

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    1. Muchas gracias. Lo has dicho bien. Es complicado y cada dis me estoy yendo al trabajo con un nudo en el estómago, llorando porque lo único que quiero es quedarme con él en casa y librarle de todo el mal. Pero eso no le ayudaría.

      Besos.

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  10. Ya sé que muchos piensan que cambiarle de colegio no es una buena opción, porque puede volver a tener esos problemas en el cole nuevo y sentir que, en el fondo, el que falla es él, y porque tampoco está bien huir de los problemas. Yo sufrí acoso durante toda la ESO y cambiarme de centro en Bachiller ha sido la mejor decisión que he tomado en la vida. Mi autoestima mejoró increíblemente y no quiero ni pensar qué sería de mí si no lo hubiera hecho. Tu hijo es un niño, y me parece que a esa edad es más importante que se quiera que no que aprenda a superar las adversidades. ¡Ya tendrá tiempo de superar palos a lo largo de la vida!

    No sé si en León funciona igual, pero en Madrid a todos los niños de un colegio se les asigna el mismo instituto. Si estás pensando que al terminar el cole empezará en otro contexto nuevo, ten en cuenta que ahí puede coincidir con todos esos niños que le acosan y que la situación podría continuar.

    Mucho ánimo a tu niño, que entre los compañeros y las cosas que has contado de su profe (¿No estará permitiendo todo este comportamiento, verdad?) la verdad es que el pobre está en una situación muy mala. Cuando yo era acosada, me cerraba en banda y no le contaba absolutamente nada a mis padres por vergüenza. Había días que estaba desesperada y lloraba por las noches cuando nadie me veía. No dejes que esto le ocurra a ti hijo, ni que se sienta solo. A veces un te quiero y un abrazo por parte de nuestros padres es lo que más falta nos hace.

    Besos.

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    1. Este lo cuenta todo, y a veces lo da mucha importancia y otras nada. No le pregunto porque no quiero hacer una montaña de las pequeñas cosas de cada día. Le explico cuando me cuenta algo lo que me maree importante y lo que no. A veces llora porque fulanito le ha dicho que no quiere ser amigo suyo, simple embargo no culpa a los niños que le dieron con la puerta, porque fue jugando, sin querer, o lo que sea. Y no seré yo la que lo dé importancia delante de él. Veremos como evolucionan las cosas. Lo bueno que tiene es que no se acobarda ante ellos. Protesta mucho y es muy llorón pero es muy difícil que haga cosas que no quiere hacer o que le convenzan de algo con lo que no está de acuerdo.

      Besos. Y gracias.

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  11. Aún hoy en día no entiendo porqué esta forma de comportarse de l@s ni@s. Pero, de nuevo, pienso en esos padres y esas madres que fomentan este tipo de conductas (consciente o inconscientemente). Hay graves problemas de falta de empatía... y de cuernos retorcidos en general ¬_¬ (perdón por la expresión)
    En fin, ánimo, ya queda menos para las vacaciones...
    Un besazo

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    1. En eso estamos. A ver si llegan las vacaciones y descansamos.

      Besos.

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  12. Ya te he leído más veces de este tema, aunque de forma más sútil. Recuerdo las dudas sobre el cambio del cole.
    Entiendo que quieras verlo con perspectiva, quitando hierro y demás. Pero Ro, blanco y en botella... Personalmente, y perdona que opine, creo que un cambio de colegio donde empezar de cero, sería bueno. No soy docente ni conozco el caso en detalle, así que no des importancia a mi comentario, pero tenia que decirlo. Me da mucha pena por el niño y por ti.
    Besos y que tomes la mejor decisión posible

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    1. Lo del cambio de colegio aún no lo descartamos, pero es muy complicado, por temas de horarios, porque mi chico trabaja a turnos y tenemos que contar con su hermano para llevarle al cole. Además, pienso que ahora, que parece que progresa, solo conseguiríamos un retroceso. Quizá me equivoco y la que tengo miedo al cambio soy yo.

      Besos y gracias.

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  13. Ro...como maestra interina(casi cada año estoy en una escuela diferente y no puedo hacer seguimiento ni ver como evolucionan los alumnos con los que he estado)te puedo decir que en los casos de niños con problemas relacionales,el papel de la tutora es básico,primordial.Esos niños tienen una etiqueta puesta y están en un círculo vicioso del que cuesta salir.Mi papel es subirles la autoestima delante de sus compañeros,día tras día,día tras día.Yo me lo pongo de objetivo y aunque suene como suene siempre se ha solucionado el caso.Soy muy insistente en estos temas....Ya sabes como funciona..si la tutora apoya especialmente a un niño,los demás cambian su actitud hacia él, hacen un cambio espectacular y sus compañeros les buscan para jugar con ellos.No conozco otra solución..ni psicólogos ni nada..LA TUTORA.
    El año que viene por suerte seguiré con mis mismos alumnos de este curso y podré hacer el seguimiento.Yo me siento muy sensibilizada en estos temas.Mucho.Pero de la misma manera,sé que no todo el mundo está tan sensibilizado.
    En tu caso estaría muy encima de la tutora y si hace falta,habla con el equipo directivo.
    Besos y todo mi ánimo,Ro.

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    1. La maestra de mi hijo, que le había dado inglés los dos cursos anteriores, sabe bastante bien lo que hace. Es de las profes que, ante un examen casi en blanco, jamás dice que lo han hecho mal sino "not very bad", ya sabes. Me gusta, así como la atenrior no me gustaba, esta me gusta, y se nota su trabajo, y también la profe que le da matemáticas, que al principio fue muy estricta con él y creí que iba a funcionar mal, ahora dice que no solo no le riñe por sus despistes (déficit de atención, ya sabes) sino que le felicita por sus resultados y por su trabajo. Está supermotivado con ella. Y sus notas respecto a segundo (está en tercero) han mejorado un montón. Ya sé que no es cuestión de notas, pero eso también hace que él se sienta mejor, y que no se considere tonto cuando saca dieces en muchos exámenes.

      Me alegro de que repitas cole. Diez años de interina me avalan para decir que es un rollo cambiar todos los años de todo...

      bEsos.

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  14. Ro, supongo que ya lo has pensado: actúa. De débilmente nada. Ahí hay acoso, y "son cosas den iños", qué cosas, le han dejado la puerta marcada en la cara a un niño que había huído muerto de miedo. Qué divertido y qué genial.

    No lo dejes pasar. Y mucho ánimo.

    Yo sufrí acoso en el colegio -quizá no tanto como tu nene, pero sí me dejaban de lado siempre- y si no hubiese sido porque mis padres no permitieron que llegase a mayores, no sé... Miedo me da pensarlo. Además lo cargas toda la vida, aunque lo superes. :(

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    1. Llevamos un seguimiento intensivo del niño desde poco después de cumplir cinco años. A veces creo que tanto seguimiento hace que él de vez en cuando tenga arranques de "nadie me quiere, no me hacen caso y no tengo amigos" injustificados. Hoy estuvo jugando en el recreo con todos los de su clase a polis y cacos. Lo sé positivamente. Sin embargo, cuando le digo: ¿Qué tal el día? siempre me dice que fulanito le ha dicho que es tonto y muy malo en un juego. Es una tontería, pero creo que él espera mi reacción, sobre todo mi reacción, ante las cosas que le pasan, que trata de llamar la atención, porque llevamos casi cuatro años dedicados a él más que a ninguna otra cosa.

      Sé que no me estoy explicando. Su papel, el de pringao, el del tonto de la clase, se lo adjudicaron, lo hemos peleado muchísimo, todos, salvo quizá la directora del colegio que no ha hecho nada salvo curarse las espaldas por si se nos ocurría presentar una queja. Lo hemos trabajado, pero él es una víctima fácil cuando sus compañeros tienen el día cruzado.

      Intento no dejarlo pasar. Pero tengo que tomar distancia para que no me pueda, porque, aunque delante de él evito reacciones de ningún tipo, me he pasado cuatro días llorando por las esquinas y sin ganas de nada. Ahora lo retomo, cojo aire, y sigo adelante. No sé si hago bien o mal. Pero estoy haciendo lo que puedo.

      Vale, te solté el rollo.

      Gracias, Bettie.

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    2. Eres una buena profesional, y creo que eres una buena madre, y que intentas conjugar lo que sabes como profe con lo que sientes como madre. Y creo que lo haces bien. :) Quizá quiera captar tu atención, quizá se quede con lo negativo. Quién sabe. Es una losa que pesa cuando te han tratado así. Ya te digo: hace muchos años que dejé de sufrir acoso, y aún hoy a veces tengo miedo cuando tengo que entrar en un grupo nuevo, de convertirme en la pringada, la gordita, la gafotas. O la empollona.

      No sé, quizá de cara al exterior no puedas hacer más que mantener los ojos abiertos. Quizá lo más importante es que tu peque tenga las herramientas necesarias para no creerse ese papel, para dejar atrás esas experiencias y no echarse la culpa de ellas (a veces pasa).

      En fin, que de rollo nada, que para eso estamos. A veces nos reímos, y otras, nos sermoneamos :P

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  15. Hola Ro
    Siento mucho por lo que estas pasando. Te mandó mi opinión por sí te sirviera de algo.

    Yo creo que si es algo está sucediendo en el colegio una de las responsables que tiene que actuar es la profesora. Tiene que prestar especial atención. Se que no es fácil porque los episodios de acoso suceden cuando es profesor no está mirando, recreos, cambios de clase, ya lo sabes.

    La orientadora tiene que tomar cartas en el asunto y trabajar con todo el grupo. Me imagino que ya has hablado con ambas. Sería bueno que seleccionara algunos alumnos de clase, que actuaran de cortafuegos, es decir, cuando empiecen a meterse con él cortarán a los líderes con cosas del tipo "dejadle en paz, no os metáis con el". Ya sabes que siempre hay un líder y los demás le siguen. Si se consigue cortar a los líderes los demás dejarán de seguirles por temor, ya sabes que suelen tener miedo a ser los acosados y prefieren seguir la corriente.

    Ya se que sabes todo esto, por sí acaso te lo recuerdo por sí te pudieara ser útil.

    Un abrazo

    Norma

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    1. Conozco los mecanismos más o menos. Las cosas son más complejas siempre de lo que puedan parecer. La tutora de mi hijo lo conoce bien y ha conseguido muchas cosas, cambios importantes. Él no se siente querido, pero ella me insiste en que sus compañeros le quieren mucho. Sé que le quieren más como una mascota que como uno más. No sé si me explico. Mi hijo es especial. No tiene nada malo, pero se adapta mal a las cosas, y tiene un retraso de la maduración bastante acusado, agravado con que es el menor de su clase. Se lleva casi un año con sus compañeros, que además parecen dos. Y eso es mucho.

      Bueno, ya digo que es más complejo. Lo doy muchas vueltas a todo. Y se pasa muy mal, sobre todo cuando le hacen daño. Pero estamos haciendo progresos y los psicólogos y el psiquiatra dicen que las cosas no se consiguen en poco tiempo, que tenemos que ser pacientes... Lo que pasa es que la paciencia, cuando se trata de mi niño, la tengo un poco agotada.

      Gracias, guapa.

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  16. Solo puedo decirte que mucho ánimo, la gente y sobretodo los niños pueden ser muy crueles. Se que es muy fácil decirlo pero muy complicado hacerlo pero debéis trasmitir a vuestro hijo seguridad en si mismo, que no se crea peor que nadie y que sea capaz de que le respeten, esto lleva tiempo y dedicación y muchas veces no sabemos ni como hacerlo, pero los que tenemos hijos sabemos que la paciencia a veces se agota, por eso te mando muchos ánimos y piensa que todo tiene solución, sólo hay que saber encontrarla. Muchos besos

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    1. Eso intentamos, lo de transmitirle seguridad, y a veces creo que nos pasamos en lo de subirle la autoestima y todo eso. Y hay momentos, como últimamente, en que se me acaba la paciencia y los recursos.

      Muchas gracias por los ánimos.

      Besos.

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  17. Jo Ro, no sabes cómo lo siento. Ayer te leí, y no podía creerme que fueras precisamente tú la "madre de", con todos los niños a los que ayudas. Pero me pilló un mal momento, y me dió una llantera que enlacé con motivos personales que no me dejó comentarte.
    Por partes, primero, supongo que sabes que hay otra bloguera que tiene un libro publicado acerca de ese tema. El libro se llama Magdalenas con problemas, ella es Ana (Bergua), princesa del guisante. Yo no lo he necesitado y no sé que tal es, pero míralo a ver.
    En la clase de mi hijo hay una niña que está exactamente en las mismas circunstancias que tu hijo, o muy parecidas. A ver, es una niña muy inquieta (hiperactiva, diagnosticada y medicada), siempre está "molestando" a los demás, a veces pegando, o simplemente fastidiando, y es que es excesivamente inmadura. Su madre siempre se queja de que, por unos días (nació a finales de diciembre), no cayó en un curso siendo la mayor, en vez de la pequeña, lo cual le hubiera beneficiado mucho. A nivel académico no tiene problemas, pero si en cuanto a sus relaciones; a veces se meten con ella, no es lo normal, pero tampoco está integrada en el grupo, no tiene amigas de verdad porque es como si no supiese jugar, al menos a un nivel "normal". La madre de esta niña también podemos deducir que es/ha sido hiperactiva, y siempre dice que ella sacó unas notas bastante corrientes hasta que llegó a 8º, que empezó a lucirse. Supongo que esa fue la verdadera época del cambio. Quizá a tu hijo, entre otras cosas, le falten unos años de madurez. Yo creo que lo más importante es que esté yendo al psicólogo y psiquiatra, y que ellos le den la ayuda necesaria para afrontar estos años como mejor pueda. Ay, si pudiéramos quedar todas e ir a darle una charla a los padres de sus compañeros... Te lo arreglábamos en un momento. Besos guapa, y desahógate o pide ayuda, que para eso estamos.

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    1. Veo a mi hjo reflejado en lo que cuentas. No sabe jugar con los demás, está aprendiendo, pero no le sale de manera espontánea, salvo con algunas personas, sobre todo con las niñas que no le exigen siempre una competición, como es el caso de muchos niños. Él lleva las cosas a su manera pero lo está pasando muy mal. A ratos, y por días.

      Gracias.

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    2. Ro, yo soy la autora del libro que te recomienda Sara M. (Hola Sara, gracias por hacerme publi!).

      A Pablo, el protagonista del libro, no le funciona esconderse, no le funciona el contraataque, (nunca funciona). Llega a enfermar de pensar que tendrá que volver a la escuela.

      La clave para vencer el acoso escolar es la autoestima. Nadie se merece ser despreciado por causa alguna. El acoso escolar acaba cuando el entorno, el resto de niños, se ponen de lado del más débil,. Mientras, la función de los padres mostrando lo maravilloso que es ser diferente, sensible, frágil, bello, inteligente, haciendo rugir al león que el niño lleva dentro, es básica. Te recomiendo que hables con la escuela, y te anticipes al problema.
      No sé si puedo ayudarte, pero puedes contactar conmigo si lo necesitas comolaprincesadelguisante@gmail.com

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  18. Lo siento Ro. Poco a poco, espero que se vayan asentando las cosas. Un beso.

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    1. Eso espero, pero todo tiene que ser despacio... muy despacio...

      Besos.

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  19. Joder, qué lío. Menudos bastardos pueden llegar a ser los niños. Lo siento, Ro, espero que el asunto mejore. De lo contrario, el cambio de cole es una buena solución, bueno, ya lo sabes, que también eres del gremio.

    En fin, un abrazo enorme.

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  20. ¡Hola! Conozco un caso de un familiar. El acoso se lo hacían los compañeros y una profesora. Con el cambio de colegio, volvió a la normalidad y ya nunca ha vuelto a verse mal. Se ve que, al cambiar de grupo, cambian los roles y no se quedan siempre con las etiquetas, sino que el que era "el malo", en otro contexto, ya no lo es tanto, el empollón puede verse más "cool", etc. La presión del grupo, muchas veces, es nefasta... ¡Mucho ánimo!

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  21. Durante muchos años fui la pringada de clase y como consecuencia tengo una vida que quizá de otra manera no tendría. Dejé de querer salir con mis "amigas" aquí y prefería irme al pueblo, allí me eché un novio, siendo bien pequeña, que hoy es mi marido y padre de mis hijos. Ésa es la parte buena. La mala, no he hecho muchas cosas que podría haber echo, porque el miedo me paralizaba, no quería salir de mi entorno. No he viajado apenas hasta hace muy poco, no he ido a cursos de idiomas en el extranjero, pese a que mis padres me lo ofrecían cada año, he estudiado muy cerca de mi casa, porque no quería estar mucho tiempo fuera ...
    Y ahora, Peque, mi mayor, está teniendo problemas de adaptación. El año pasado estuvo en una guardería donde apenas trataba connadie. Entraba llorando cada mañana y salía serio.
    Le cambiamos de guardería y ha mejorado bastante, pero sigo notando que le cuesta hacer amigos y que muchas veces prefiere estar solo.
    El año que viene comienza el cole, donde coincidirá con bastantes compañeros de la guardería, con los que, además, hemos empezado a salir muchas tardes, intentando así que la integración en el grupo sea mejor, pero no las tengo todas conmigo.
    Como ves, en ningún caso he nombrado la palabra acoso, primero porque creo que en nuestro caso no se trata de eso, y segundo porque, si lo fuera, no sé dónde está el límite.
    Pero es algo que me preocupa, y mucho.

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