¿Puente?

Desde el punto de vista del trabajo, siempre me han parecido estas fechas las menos indicadas para hacer un puente. Los alumnos están en plenos exámenes, queda nada y menos para terminar el trimestre y solo sirve de distracción.

Fastidia no tener puente, por supuesto que sí, y en los últimos años así ha sido.

Este año, casualidades de la vida, nos han dado de puente el viernes y el lunes. Bueeeeno, no me quejaré.

Había pensado en coger a mi chico e irnos a un destino invernal, lejano, los dos solitos. Pero él trabaja hoy, y no encontré combinación que me gustara.

Finalmente, nos decidimos por Madrid. Madrid es siempre una buena idea.

Aunque ayer vi en las noticias que está a tope de gente disfrutando de la pre-Navidad, sus luces, el encanto de sus calles.

Pues eso: que me voy de puente, en plan novios, a disfrutar de un montón de cosas que ya tenemos planeadas, entre ellas comer aquí, cenar allá, desayunar en el otro lado... Lo que ahora llaman turismo gastronómico y que es una de las primeras cosas que organizo cuando voy de viaje.

Os espero el martes. Y ya os contaré.