martes, 14 de noviembre de 2017

Yoga

Hace unos cuantos años, nada menos que trece, me encantaba el yoga y llevaba ya tiempo practicando. Tuve que dejarlo en el primer trimestre de embarazo del pequeño, y después, por diversas circunstancias, no he vuelto, pero siempre lo he anhelado.




Primero pensé que, igual que había ido teniendo un niño pequeño, podría ir teniendo dos. Y los que sois padres sabéis que eso no es así. No encontraba un hueco en los primeros años. Después, cuando quise volver, los horarios solo me permitían ir al mismo sitio, pero a pilates. Me apunté y estuve yendo unos meses, pero no me gustaba nada.

Más tarde, abrieron un centro de pilates a dos pasos de mi casa. Ahí no tenía excusa para no ir. Empecé con muchas ganas, pero de nuevo el pilates me resultaba tan aburrido que nunca me apetecía bajar.



Total, que el curso pasado ya estuve asistiendo a clases de zumba pero no encontré la manera de empezar con el yoga, así que lo practicaba un par de veces a la semana, en casa, con algún vídeo. Pero me sabía a poco y tenía claro que era el momento de volver.

Busqué un sitio nuevo, no lejos de casa, que me convenciera en cuanto a instalaciones y horarios. Y me apunté a la hora que más me convenía. Pero resultó que el profesor era un rollazo. Pero un auténtico tostón. No notaba ningún avance, y eso es algo que me gusta del yoga, que enseguida notas mejoría en tu cuerpo, que pronto notas que la semana pasada te doblabas hasta aquí y esta semana te doblas un poquito más. Y me parecía que hacíamos todos los días lo mismo, con una intensidad, no ya moderada, sino muy baja. Es más, todos los días salía de allí helada de frío, cuando lo normal es sudar, y mucho.



El caso es que este mes de noviembre me he cambiado de horario y de profesor. Tengo una profesora genial y cañera y me encantan sus clases. El horario hace que esté siendo un poco caótico todo ahora al principio, hasta que me acostumbre. Porque voy justo al llegar de trabajar, sin pasar por casa. Eso hace que tenga que comer algo antes de salir del instituto, y que luego toque una merienda-cena un poco más fuerte de lo que sería normal. Por otra parte, ese horario hace que tenga la tarde libre a partir de las cinco para dedicarla a lo que sea, y eso está muy bien. Así que de momento me quedo en esta hora, sobre todo por la profe.




Por si hay algún experto en la sala, el yoga que yo había practicado durante tres años hace mucho tiempo era Hatha yoga, es decir, más que nada la práctica de las asanas, de las posturas, pero también mucho de la respiración y hacíamos algo de meditación, aunque solo de vez en cuando.

El yoga que estoy empezando a hacer es vinyasa, que es un yoga más fluido, en el que unas posturas y otras se entrelazan formando un movimiento continuo al ritmo de la respiración. No sé cómo explicarlo mejor. Si alguna vez habéis visto la secuencia del saludo al sol, eso sería vinyasa, aunque se practique en otras formas de yoga.



Me encanta ir, no me da ninguna pereza, estoy deseándolo y por eso creo que esta vez el yoga ha vuelto a mi vida para quedarse.


16 comentarios:

  1. Yo siempre había tenido la idea q el yoga era cosa de gente un poco rarita, perdóname el atrevimiento...no sé, quizá porque a la primera persona q conocí q lo practicaba era la madre de mi marido...¡q tela con la señora!
    Pero luego hicieron un taller de yoga familiar en el cole, fuimos con la peque y ¡lo disfrutamos un montón! de hecho la comentamos a la profe la posibilidad de organizar una clase los sábados, pero por el momento no ha sido viable.
    A mí me gustaría ir a clase, pero cerca no encuentro nada q se adapte a mis horarios, dices q practicabas en casa con videos, porfa, pon algún enlace de los q tú usabas.
    Saludos.

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    1. No tengo un sitio concreto de vídeos para practicar, más que youtube. Normalmente busco yoga y los minutos que quiero practicar, que en casa suelen ser veinte minutos o treinta como mucho. Por ejemplo: https://www.youtube.com/results?search_query=yoga+20+minutos

      Y me salen un montón de propuestas. Elijo una y adelante.

      Besos.

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  2. Me gusta el yoga, pero nunca he encontrado a un profe que me motive lo suficiente. Me gusta para ganar flexibilidad, me está costando mucho encontrar hueco para el deporte con los dos enanos, pero por fin la semana pasada pude ir a una clase de baile de Bollywood, sí, ¡Bollywood! Soy super exótica yo y me encantó, conozco a la profe, es una amiga de mi hermana cuya mamá me ha enseñado a cocinar cocina india tradicional. Pero ya sé que esta semana no me cuadra el horario para asistir, así que bailaré en casa gracias a San Youtube. Después de meditarlo mucho me he dado cuenta que bailar es el único deporte que hago a gusto y sin pereza. Espero seguir con la rutina de bailar todas las semanas porque mi cuerpo necesita moverse YA

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    1. Bollywood!!! Ni se me habría ocurrido. Yo voy a zumba, que no deja de ser baile, y es una forma de moverme y me resulta divertido, aunque mi profe de este año no es muy maja, la verdad.

      Besos.

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  3. Yo fui a clase de yoga hace unos años, en el 2011, pero cuando llevaba casi tres meses tuve que dejarlo porque escayolaron a mi hija, y necesitaba mi ayuda por las noches. Cuando quise volver, habían cambiado los horarios y no pude.
    Hace tiempo que estoy deseando volver, pero me resulta imposible. No encuentro nada cerca ni que se adapte a mi horario. No he aprendido lo suficiente para practicar sola en casa, pero algunos días a la semana sí hago el saludo al sol nada más levantarme.
    Como han dicho por ahí arriba ¿podrías poner el enlace a algún vídeo de los que ves para practicar en casa? Gracias

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    1. Lo de los enlaces lo contesto ahí arriba. No tengo una página a la que siga o que me haya resultado mejor que otras, y ahora apenas lo hago en casa.

      Besos.

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  4. Que bueno! He hecho yoga en algunas ocasiones, pero nunca fui muy constante.. Es un ejercicio muy bueno para el cuerpo, y también para la mente..

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    1. Yo lo hice, de forma continuada, unos tres años, y se me daba bien. Ahora mi cuerpo es otro y creo que me está costando más, pero eso es lo bueno, la mejora.

      -bess.

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  5. ¡Bravo! Eso me ha pasado a mí con la danza oriental. Me rompe dos tardes por la mitad, pero me da igual. No importa cómo llegue a clase, salgo de allí relajada y contenta. Y mi cuerpo lo nota. Me siento más flexible, más ágil, y satisfecha. Es cierto que, por ejemplo, en danza oriental no se ven los progresos muy rápido. Llevo dos meses y bailo muy poco, pero bueno, poquito a poco. No tengo prisa. Y solo por lo bien que me hace sentir, me compensa.

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    1. A mí me parece lo de menos el horario si voy contenta, aunque en realidad se complica porque tengo que compaginar con las clases del conservatorio del peque, que son casi todos los días.

      Besos.

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  6. Pues yo con lo que empecé hace unos meses fue con el pilates, y no es que me vuelva loca, pero me siento mucho mejor. No sé dónde he oído que el yoga es como el paso siguiente al pilates, y la verdad es que me gustaría probarlo (de hecho el año pasado, buscaba cualquiera de los dos), pero no tengo nada cerca ni que me venga bien de horario :( Pero en cuanto encuentre algo, me apunto para ver qué tal. Y yo también te voy a pedir que pongas los enlaces, a ver qué me parece aquí en casa. Porfaaaaaaaaa

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    1. En pilates se tarda más en ver cómo mejora todo eso del centro, del core. Sirve de mucho porque el yoga trabaja primero también el centro, no sé cómo explicarme. El caso es que si has hecho pilates el yoga creo que te resultará más entretenido.

      Los enlaces no tienen misterio. Lo explico más arriba. No tengo una página de cabecera.

      BEsos.

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  7. Pues yo llevo un par de meses yendo a yoga y estoy encantada. Hacemos respiración y posturas en plan suave, porque es con fines terapeuticos organizado por mi fisio. Es lo que dices, se notan los progresos y se suda mogollón.

    La semana pasada empezamos con el saludo al sol. Fue tan desastroso que el sol nos dijo que nos fuéramos a la porra, pero seguiremos intentándolo.

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    1. El saludo al sol es más complicado de hacer bien de lo que parece. Nosotros en este mes que llevo con la profe nueva aún no hemos hecho la secuencia completa, pero sí algunas partes y se suda lo indecible.

      Besos.

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  8. Pienso igual que tú, llevó algunos meses sin hacer yoga por mui dichoso manguito y estoy deseando empezar de nuevo, me noto los beneficios enseguida, así es que enhorabuena por tu decisión.

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    1. Se nota muy pronto lo que mejora tu cuerpo. Es un deporte que haces contigo mismo, y cada vez vas a más. Eso motiva un montón.

      Besos.

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